Con ilusión esperaban Desided Ortega Martínez y Andrés Vásquez Vásquez el fruto que consolidaba su unión como pareja. La llegada de Escarlet era el acontecimiento esperado después de tres años de relaciones.

Lamentablemente, lo que ellos consideran una negligencia médica, truncó el sueño de tener a su pequeña en brazos. La pareja interpuso una denuncia en la URI de la Fiscalía en contra de la Clínica San Joaquín, ubicada en la calle 34, número 33 – 55, por el fallecimiento de su hija al poco tiempo de nacer.

La pareja vive en Santa Cruz, corregimiento de Luruaco, pero estaba en Barranquilla para hacerle unos chequeos de rutina cuando se presentó la ruptura de fuente. Andrés es conductor de motocarro en el pueblo. Desided ya tiene una hija producto de otra relación sentimental, pero la bebé que falleció era la primera de su actual pareja, que tiene 20 años.

Los hechos. En la denuncia instaurada en la Fiscalía este viernes, está consginado que Desided, de 27 años, llegó a las 8 de la noche del miércoles 15 de febrero con dolores de parto y al parecer habría “roto fuente”. “Entramos por urgencias y los médicos de turno la atendieron normalmente, pero no le dieron la importancia que necesitaba aun a pesar de que se habían dado cuenta de que ella había reventado fuente, en ese instante el personal médico nos manifiesta que se encontraban a la espera del médico cirujano y anestesiólogo”, relató al ente Vásquez.

A Desided Ortega la pusieron en espera junto a otra a mujer que estaba en labor de parto y la programaron para las 4:30 de la mañana, en el segundo turno. Sin embargo a las 4 de la tarde el anestesiólogo no aparecía y llegó una tercera parturienta, por lo que a Ortega la pasaron al tercer turno. Los familiares de las mujeres se molestaron y presionaron a las directivas del centro asistencial por la demora, estos alegaron que los médicos para las cirugías no habían llegado.

“El anestesiólogo apareció a las 6:30 de la tarde pero a mi hermana sólo la atendieron a las 11 de la noche. Más de 25 horas después de haber ingresado a la clínica”, contó Laura Ortega, hermana de Desided.

En la declaración de Andrés Vásquez quedó establecido que el parto se había llevado a cabo y la bebé habría nacido con “un excelente estado de salud”. Pero a las 4:40 de la mañana un médico les informó que Escarlet sufrió un paro respiratorio y había fallecido.

Negligencia médica

Con exámenes en la mano, los familiares de la bebé fallecida manifestaron que en ninguno de los exámenes que le practicaron ni en las ecografías se habían presentado anomalías en el corazón o los pulmones.

Laura Ortega afirmó que la demora en la atención del parto produjo complicaciones en la salud de la menor “que se encontraba sin líquido amniótico con el que poder respirar o alimentarse”. La tía de la recién nacida dijo que incluso pudo haber tragado y broncoaspirado sus propias heces fecales.

“Lo que nosotros queremos es que haya una investigación y que nos expliquen qué pasó. No puede ser que la bebé se haya muerto porque nos tuvieran esperando tanto tiempo. Tiene que hacerse justicia”, finalizó el padre de la menor fallecida